jueves, 15 de septiembre de 2011

Sobre la Traicion en Nepal sus Autores y sus Complices

Publicamos este importante documento de la Union Obrera Comunista a traves de su vocero, sobre los recientes acontecimientos en Nepal.


  
La Imagen es tomada de Odio de Clase.

—Comunicado—

El 8 de noviembre de 2006 se confirmó la firma de un Acuerdo de Paz, entre el Partido Comunista de Nepal (Maoísta) PCN(M) y el Gobierno interino de Nepal. Hasta ese momento una Guerra Popular de 10 años dirigida por el mencionado partido, había logrado acorralar en la capital Katmandú, a la centenaria monarquía de ese país y a su ejército reaccionario, obligando al rey a dejar el mando del gobierno directamente en manos de las clases dominantes, la burguesía y los terratenientes.

Pero inesperadamente los dirigentes del PCN(M) decidieron parar la guerra popular, y abandonar el propósito programático de destruir el viejo Estado reaccionario con la violencia revolucionaria de las masas, y construir un Estado de Nueva Democracia, como forma de la Dictadura del Proletariado en ese país semifeudal y semicolonial. En su lugar, los dirigentes del PCN(M) se dedicaron a negociar, con los partidos políticos reaccionarios de las clases explotadoras y los partidos reformistas de la pequeña burguesía, su participación en el viejo Estado reaccionario para “remodelarlo”, comprometiéndose en el Acuerdo de Paz a desmantelar las bases del poder popular, desarmar al pueblo, guardar las armas del Ejército Popular de Liberación-EPL bajo llave en contenedores de la ONU, fusionar a sus soldados en el ejército reaccionario (el mismo ejército real que estaba a punto de rendirse), formar un nuevo parlamento, un gobierno interino donde los jefes maoístas tuvieran asiento en algunos ministerios y convocar una Asamblea Constituyente.

Una abominable felonía que los dirigentes del PCN(M) presentaron bajo el nombre de “teoría táctica para la revolución en el siglo XXI”, por lo cual recibieron aplausos de todos los reaccionarios de Nepal y de la burguesía imperialista, respaldo del oportunismo internacional alabándola como muestra de cordura y sensatez de los “maoístas”, apoyo tácito en el silencio del extinto Movimiento Revolucionario Internacionalista-MRI y apoyo abierto de algunos de sus partidos para quienes era un “ejemplo de flexibilidad táctica” y de “desarrollo del marxismo” a las condiciones del nuevo siglo, llegando hasta el ridículo argumento de algún jefe del Grupo Comunista Revolucionario de Colombia (1) que en un acto público convocado por Revolución Obrera, él justificó el Acuerdo de Paz como “gran estratagema para engañar a los reaccionarios y a los imperialistas”.

Por su parte, partidos y organizaciones marxistas leninistas maoístas de diversos países, de inmediato denunciaron la traición del PCN(M), tal como lo hizo el camarada Azad, Vocero del Partido Comunista de la India (Maoísta), quien luego fuera vilmente asesinado, porque sus ideas y su práctica eran completamente opuestas a la capitulación de los jefes maoístas de Nepal, como públicamente lo declaró el 13 de noviembre del mismo 2006: “Un nuevo Nepal sólo puede emerger derrotando al estado reaccionario. El depósito de las armas del EPL bajo la supervisión de la ONU llevará al desarme de las masas.” “No hay nada más peligroso para el imperialismo y los reaccionarios que las masas armadas y por tanto entrarán gustosas en cualquier acuerdo para desarmarlas.” “El acuerdo de los maoístas de ser parte del gobierno interino de Nepal no puede transformar el carácter reaccionario de la maquinaria del estado que le sirve para la explotación a las clases dominantes y al imperialismo.” “Un principio fundamental del marxismo es que no puede haber cambios básicos en el sistema social sin demoler la maquinaria del estado.”

También el Comité Ejecutivo de la Unión Obrera Comunista (MLM) llamó públicamente el 14 de noviembre a “Combatir el Oportunismo Traidor en la Dirección del Partido Comunista de Nepal (maoísta)” “La decisión de la dirección del Partido, de firmar un Acuerdo de Paz bajo el compromiso de deponer las armas y participar en el gobierno burgués y en una Asamblea Constituyente, es una clara traición al pueblo y al proletariado internacional. Renunciar a destruir el Estado reaccionario con la Guerra Popular es una postración ante el poder de la burguesía y la peor manifestación de desconfianza en el Poder que emana de las masas armadas y organizadas. Rechazamos categóricamente la decisión de la dirección del Partido Comunista de Nepal (maoísta) de deponer las armas y renunciar al camino de la Guerra Popular.”

En efecto, firmado el Acuerdo de TRAICIÓN en Nepal, sus dirigentes por unanimidad, se dedicaron al trapicheo politiquero con la burguesía y sus congéneres oportunistas, en especial tras el cargo de Primer Ministro, que desde entonces se lo han rotado entre Koirala (del burgués Partido del Congreso), Prachanda (del revisionista PCN(M)) quien dimitió a los 8 meses incapaz de remover al jefe militar del Ejército, Khanal (del oportunista partido pequeño burgués UML) y ahora Bhattarai (de nuevo por el revisionista PCNU(M) (2)) quien fue elegido a finales del pasado agosto por la Asamblea Constituyente.

Así, Prachanda y Bhattarai, ayer jefes de la guerra popular, hoy con el respaldo de su partido han pasado en calidad de Primer Ministro, a encabezar en el Estado reaccionario, la ejecución de la dictadura de las clases explotadoras sobre el pueblo. Es la continuación de la traición y de su auxilio directo al Estado reaccionario, mediante la práctica del ministerialismo, denunciado ya en los tiempos de la II Internacional a fines del siglo XIX, pero que todavía es descaradamente saludada por partidos “maoístas” que ven en ella “pasos de avance de la revolución en Nepal”.

El programa actual del PCNU(M), es el programa burgués y reaccionario de completar el proceso de paz y acordar la nueva Constitución, defendido tanto por el bloque de Prachanda–Bhattarai, como por el de Kiran-Badal-Gaurav-Basanta, éste último reivindicado por algunos partidos maoístas como la línea revolucionaria del PCNU(M) del cual niegan su carácter revisionista, cuando en realidad las diferencias entre esos dos bloques, son sólo en la forma de cumplir la traición pactada en el Acuerdo del 2006: mientras los primeros agregaron a la traición la entrega simbólica de las llaves de los contendores con las armas del EPL, a un Comité Especial de Integración del Ejército, los segundos exigen “la integración digna del EPL [al ejército reaccionario]… con armas y en grupo… con el espíritu del Acuerdo de Paz Global” (3). O sea, una divergencia completamente secundaria y sobre todo estúpida, porque de hecho las armas ya fueron arrebatadas de manos del pueblo por el Acuerdo de noviembre del 2006 que las entregó a la supervisión de la ONU!!!

¡Execrable traición consumada hace cinco años!, pero que el MRI de entonces y la mayoría de sus partidos de entonces, se empeñaron en ¡negar, eludir y silenciar!, en una conciliación con el revisionismo que el proletariado mundial nunca les perdonará, así ahora, algunos emitan voces de sorpresa, rabia y repudio ante las nuevas infamias del PCNU(M), y se vuelva a implorar, como ocurrió cuando Prachanda en el 2006, un compás de espera centrista de “no precipitarse” en la confrontación al bloque igualmente traidor de Kiran.

La base teórica oficial del PCNU(M) no es el marxismo leninismo maoísmo, sino el revisionismo!

La línea política oficial del PCNU(M) no es la destrucción violenta del Estado reaccionario, sino su defensa, “remodelación” y en últimas, sumisión a la dictadura burguesa!

La simple denuncia a la camarilla Prachanda–Bhattarai no basta para el deslinde entre el marxismo y el revisionismo; es indispensable reconocer el carácter revisionista y traidor del PCNU(M) y renunciar a la pretensión centrista de promover la unidad de los MLM con ese partido!

Una verdadera línea revolucionaria en Nepal, está obligada a romper con la línea revisionista del PCNU(M), a denunciar su traición perpetrada en el Acuerdo de Paz del 2006, y a levantar de nuevo las banderas de la lucha a muerte contra la burguesía, los terratenientes, los imperialistas y todos los reaccionarios!

Confiamos plenamente en que los comunistas honrados y firmes de Nepal, armados del marxismo leninismo maoísmo, de nuevo encontrarán en los obreros y campesinos la base social de la revolución, que con las armas derrocará, hará añicos y barrerá el Estado reaccionario que oprime al pueblo para garantizar los privilegios de los explotadores, Estado que hoy encabeza el “maoísta” Bhattarai en el cargo de Primer Ministro.
Periodista Vocero de Revolución Obrera
Colombia, Septiembre 13 de 2011


(1) Esta organización, que oficial y públicamente nunca dijo nada sobre la traición en Nepal, por esos días, en apoyo al revisionista Camino Prachanda, difundía sin crítica una recopilación de sus principales documentos.

(2) Se refiere al Partido Comunista de Nepal Unificado (Maoísta), producto de la fusión el 13 de enero de 2009 del PCN (maoísta) y el PCN (Ekata Kendra Masal).

(3) Ver Comunicado de Prensa de Kiran y Badal el 2 de septiembre: Let us oppose the decision of handing over the keys! Let us implement the decision of dignified army integration!

Nuevo Poder y Bases de Apoyo en la India Maoista!!!

Publicamos este importante articulo enviado por los camaradas de Odio de Clase, que da cuenta del avance de la guerra popular y de la construccion del nuevo poder, tanto asi que es reconocido por la prensa oficial.

Agradecemos a Odio de Clase por la traduccion.


Traducido por ODIO DE CLASE

LA MANO INVISIBLE DE LOS MAOÍSTAS, DE REGRESO EN BENGALA
Por Snigdhendu Bhattacharya
10 de septiembre de 2011

De símbolo del terror y de la subyugación, los maoístas buscan ahora un cambio de percepción. O es lo que parece, al menos en sus bastiones en la región de Jangalmahal en Bengala.

En las zonas dominadas por los maoístas en Midnapore Occidental, a unos 130-150 kilómetros de Calcuta, zonas que The Hindustan Times ha visitado recientemente, los rebeldes no sólo han recuperado el terreno perdido sino que han puesto en funcionamiento, además, centros de salud y escuelas, construyen diques y reparan los caminos y embalses.

Mientras el gobierno de Mamata Banerjee intenta entablar el diálogo, los rebeldes se concentran en el desarrollo.

Tres organizaciones –Santrash Durnity O Samrajyobadi Agrason Birodhi Ganatantrik Mancha (SDSABGM), el Comité Nari Izzat Bachao (NIBC) y Chhatra Samaj (SC)- están a la vanguardia de las labores de desarrollo que los maoístas están llevando a cabo en estas áreas.

El gobierno reconoce tácitamente el desarrollo. “Ellos (los rebeldes) no nos han impedido aún llevar a cabo proyectos de desarrollo. Pero en algunos ámbitos hemos encontrado que las gentes se niegan a trabajar en nuestros proyectos una vez que han trabajado en las denominadas iniciativas populares”, dijo Sukumar Hansda, ministro de desarrollo de la región occidental.

“Sin la más mínima presencia de la administración civil, nos vemos obligados a tomar nosotros las riendas”, dijo el presidente del NIBC, Jyotsna Mahato, a The Hindustan Times en la región de Aguimoni, dependiente del puesto de policía de Jhargram.

El SDSABGM y el NIBC administran no menos de 20 centros de salud en Lalgarh, Jhargram, Gopiballavpur, Nayagram, Salboni, Belpahari y Binpur, todos ellos bastiones maoístas.

Los médicos cirujanos visitan los centros de salud paralelos al menos una vez por semana.

La cuota es de sólo 5 rupias. Y para aquellos que ni siquiera pueden permitirse el lujo de este precio, la atención es gratuita.

El SC se ocupa de aproximadamente 25 centros educativos para niños en los que jóvenes locales educados enseñan gratuitamente.

Hace un año, la “iniciativa popular” –Veri-Bandh- construyó un muro de contención sobre el río Kansabati en Bandorboni. Los trabajadores voluntarios de los pueblos vecinos construyeron el tramo de 1,5 kilómetros en sólo 23 días.

“Cuanto más pretenda la administración bloquear estas iniciativas, tanto más fácil resultará mostrar su verdadera naturaleza al pueblo”, dijo un aldeano de Kurashole, en la región del puesto de policía de Jhargram, que se despide de nosotros con un “Lal Salaam” (la forma en que los rebeldes saludan [“saludos rojos”]).

Sólo el tiempo dirá si las nuevas instalaciones son apenas un cambio de cara de los rebeldes para evitar que se les detecte, o si son la señal de una transformación real.


jueves, 1 de septiembre de 2011

Comunicado del PCI (Maoísta) contra propaganda perversa de la reacción

Todo el apoyo al  Partido Comunista Maoista de la India, no dejarse cercar por la mala opinion publica que quiere generar el Estado fascista Indio sobre la Guerra Popular en la India, estamos seguros que los dirigentes que las masas han puesto en estos importantes puestos de la revolucion, son camaradas cosagrados por entero a la causa de las masas oprimidas en la India y en todo el mundo. 

Polemica Internacional MLM


Traducido por ODIO DE CLASE


PARTIDO COMUNISTA DE LA INDIA (MAOÍSTA)
COMITÉ CENTRAL



Comunicado de prensa
19 de agosto de 2011


¡ARROJAR AL CUBO DE LA BASURA TODA LA PROPAGANDA PERVERSA DIFUNDIDA POR LAS CLASES DOMINANTES Y LOS GRANDES MEDIOS DE COMUNICACIÓN CONTRA LA DIRECCIÓN MAOÍSTA!


En el momento actual, el movimiento revolucionario indio se enfrenta a numerosos y complicados desafíos, y su avance se produce a través del proceso de victoria-derrota-victoria. Con el objetivo de destruir por completo el movimiento revolucionario, las clases dominantes han desencadenado una cruel guerra represiva con el pleno apoyo de los imperialistas. Los fascistas indios están llevando a cabo esta guerra contrarrevolucionaria siguiendo en concreto la estrategia de Conflictos de Baja Intensidad [LIC, en sus siglas en inglés] formulada por los imperialistas estadounidenses. Desde 2009 en adelante en especial, el Gobierno de la UPA [“Alianza Progresista Unida”, en sus siglas en inglés], en coordinación con los gobiernos de los estados, está librando una guerra represiva de alcance nacional bajo el nombre de Operación Green Hunt. La pretendida estrategia de esta guerra injusta desencadenada contra el pueblo y dirigida por la banda de Sonia-Manmohan Singh-Chidambaram-Pranab Mukherji, es, según dicen, “la represión y el desarrollo” (léase represión contra el pueblo y desarrollo de las grandes empresas). Como parte de esta guerra, emplean la psicológica como arma estratégica; en ella, la propaganda perversa contra la dirección revolucionaria es un instrumento clave. El uso de los grandes medios de comunicación es uno de los principales recursos en esta guerra psicológica. Periodistas que representan los intereses del sector empresarial y pseudo intelectuales apologetas de la ideología de las clases dominantes participan activamente en esta guerra psicológica encargándose de la propaganda perversa.

La propaganda contrarrevolucionaria es tan antigua como el movimiento revolucionario. El Ministro de propaganda fascista alemán Goebbels, quien dijo que repetir una mentira cien veces la convierte en verdad, se ha reencarnado en la India en Sonia, Manmohan, Pranab Mukherji, Raman Singh, Naveen Patnaik, Nitish Kumar, Kiran Kumar, etc. Los fieles portavoces de éstos, como Arnab Goswamis y Chandan Mitras, dirigen esta repugnante campaña de diversas maneras a través de los medios de comunicación. Desde la propaganda que afirma que el marxismo ha quedado obsoleto hasta la que sostiene que han surgido enconadas diferencias entre los dirigentes maoístas, se vienen publicando y retransmitiendo, día tras día, noticias contra el movimiento revolucionario y su dirección que son absolutas mentiras, cuentos extravagantes, falsedades y verdades a medias. El único y principal objetivo de esta guerra psicológica es extender la confusión, el desánimo y la desconfianza en el pueblo y en las filas revolucionarias hacia la dirección maoísta, creando dudas, prejuicios y equívocos acerca de nuestro partido y sus dirigentes. Las clases dominantes y sus intelectuales lacayunos sueñan que, engañando al pueblo, podrán seguir explotándolo y aplicando sus políticas económicas proimperialistas sin oposición alguna. Algunos periodistas de esta categoría lacayuna forman uña y carne con los funcionarios de los servicios de inteligencia y se dedican a propagar porquería sobre el movimiento revolucionario maoísta a través de los grandes medios de comunicación. La singular mentira publicada bajo el título “Surgen enconadas diferencias entre las facciones del Partido Comunista de la India (Marxista-Leninista) [Guerra Popular] y el Centro Maoísta Comunista de la India (MCCI)”, aparecida en el Times of India el 17 de julio de 2011, es, sin duda, parte de esta guerra psicológica.

Esta noticia escrita por Rakhi Chakrabarthy al dictado de los servicios de inteligencia indios no sólo apunta contra los dirigentes maoístas; también ha creado falsamente “las facciones del PCI (Marxista-Leninista) [Guerra Popular] y el MCCI” y “profundas diferencias de opinión entre ellos” en el Partido. La unidad de estos dos partidos revolucionarios, que hizo realidad las tan ansiadas aspiraciones de los pueblos oprimidos del mundo y de nuestro país, así como las ricas experiencias de ambos al superar el periodo más doloroso de sus historias respectivas –periodo denominado “el Capítulo Negro”-, ha dado paso a otro glorioso en el movimiento revolucionario de nuestro país. Sólo los revolucionarios auténticos y llenos de generosidad y desinterés son capaces de aceptar públicamente sus errores, pedir disculpas al pueblo y trabajar con la firme determinación de no repetirlos. Por eso este proceso de unidad real ha entusiasmado al pueblo oprimido y a las filas revolucionarias de todo el mundo tanto como ha disparado la angustia y el miedo de las clases dominantes indias y de sus amos imperialistas. Cabe señalar que ese fiel criado de los imperialistas y primer ministro de la India, Manmohan Singh, describió en su día al movimiento maoísta, tras esta unidad histórica, como la mayor amenaza para seguridad interna [india]. Resulta también innegable que las clases dominantes intensificaron su ofensiva fascista a gran escala contra el movimiento revolucionario sólo después de esta unidad.

Es una vieja artimaña de las clases dominantes crear divisiones imaginarias entre los máximos dirigentes de los partidos revolucionarios para que el pueblo termine por creer que ni siquiera esos partidos servirán a sus intereses debido al arribismo y a las divisiones entre sus dirigentes. Se pueden citar incontables ejemplos de todas partes del mundo. Esta noticia del Times of India es un caso más de esa propaganda llena de mala intención en contra de nuestros dirigentes, personas que, de hecho, han consagrado decenas de años de sus vidas al servicio desinteresado del pueblo. Algunos de ellos se consumen ahora en la cárcel sometidos al trato inhumano del estado, sin la más mínima asistencia o el tratamiento médico adecuado a su edad. La dureza del estado para con nuestros dirigentes, que han sacrificado todo por la liberación del pueblo oprimido de nuestro país, está alcanzando niveles sin precedentes cada día que pasa. En cierto modo, este hecho no indica sino que el estado teme la creciente influencia de la política revolucionaria y que recurre, en vano, a todo tipo de artimañas para reducirla. Nuestro Partido rechaza por completo todas estas infamias dirigidas contra nuestra dirección y hace un llamamiento a las masas oprimidas y al campo revolucionario a no creer siquiera una palabra de ellas.

En el seno de todos los partidos revolucionarios auténticos se producen diferencias de opinión y matices discrepantes entre sus miembros en asuntos ideológicos, políticos, organizativos, militares, culturales, etc. Las diferentes ideas surgen en el debate y terminan conformando una mayoría después de que todos y cada uno de los miembros han expresado su opinión sobre dichas ideas. Se trata de un proceso democrático seguido por los partidos revolucionarios que los partidos de la clase dominante no pueden ni percibir ni entender. Un partido sólo puede mantener su contenido revolucionario por medio de esas discusiones y de la crítica y autocrítica, y no siguiendo ciegamente a este dirigente o a aquél, como en los partidos burgueses. Los revolucionarios se forjan en el crisol de la lucha de clases y en un proceso permanente de crítica y autocrítica. Los servicios de inteligencia tratan de distorsionar esta atmósfera sana que existe en el Partido haciéndola pasar por su exacto opuesto y tratando de confundir al pueblo y a las filas del Partido al difundir que existen diferencias enconadas en su seno y también en “las líneas del PCI (Marxista-Leninista) [Guerra Popular] y el MCCI”. Hacemos un llamamiento a los oprimidos del mundo y de nuestro país, a los demócratas y a las filas revolucionarias para que condenen esta propaganda perversa, para que la arrojen a la basura, para que permanecan en alerta ante estas artimañas del estado y para que mantengan con toda firmeza su solidaridad con el movimiento revolucionario.

Por último, en cuanto a las llamadas diferencias de “las líneas del PCI (Marxista-Leninista) [Guerra Popular] y el MCCI”, estimamos que basta con reiterar lo que el Secretario General de nuestro Partido, el camarada Ganapathy, dijo en una entrevista concedida a los medios de comunicación en octubre de 2010.

“... La lucha entre ideas correctas e ideas erróneas es un proceso continuo en el seno del Partido. Resolveremos nuestras diferencias de opinión ateniéndonos al principio del centralismo democrático y a la luz del Marxismo-Leninismo-Maoísmo, lo cual contribuirá al desarrollo del Partido. Hemos logrado una gran unidad con la fusión de los dos partidos. De ahora en adelante, cualquier debate o conflicto de ideas que se produzca en el Partido adoptará la forma de debate ideológico y político en el seno de un partido unido y no la forma de diferencias entre el antiguo MCCI y el antiguo PCI (Marxista-Leninista) [Guerra Popular]. Afirmamos categóricamente que las diferencias nunca jamás adoptarán la forma de los conflictos anteriores a la unificación.”

Abhay
Portavoz,
Comité Central,
PCI (Maoísta)